04 ag. El Rally de Sturgis no se cancela

Cuando os hablé del Rally de Sturgis, ahora hace un par de meses, explicaba que parecía que como otros muchos grandes acontecimientos en todo el mundo, no se celebraría. Bien, estamos en Dakota del Sur, en el corazón del Oeste Americano, y por lo tanto, la previsión ha fallado. El viernes 7 de agosto empieza la octogésima edición de la más grande concentración de motoristas de los Estados Unidos (y posiblemente del mundo entero). ¿Cómo es que no se haya suspendido esta gran concentración de gente (yendo mal, esperan recibir unos 250.000 motoristas)?
Muy sencillo, por la presión de los comercios y negocios varios, que aportan más de tres cuartas partes del PIB a la economía del pueblo. Ante esto, la votación en la cual el 60% de los habitantes del pueblo se manifestaron a favor de cancelar el Rally, quedó en papel mojado. De hecho, algunos negocios decían que ellos celebrarían el Rally igualmente, e incluso se hablaba de denunciar al municipio si prohibía la concentración de motos.
Hay que añadir un elemento más: Dakota del Sur es el único estado que no ha hecho ningún tipo de confinamiento, con una gobernadora que supera incluso al Presidente Trump a la hora de evitar ponerse la mascarilla. Han tenido relativamente pocos casos de Covid-19, hecho al que ha ayudado mucho la activa política de controles en las carreteras por parte de las reservas indias (principalmente Cheyenne River y Pine Ridge, las dos reservas Lakota más grandes).
El ayuntamiento de Sturgis se ha visto empujado a permitir la celebración del Rally, pero cancelando algunos actos y promoviendo las pruebas de PCR, para intentar evitar un posible brote de coronavirus.
La gran concentración de motoristas de Sturgis será el único gran acontecimiento que se celebrará este año en los Estados Unidos. Todo el mundo estará atento para ver qué pasa, y si realmente hay brotes de coronavirus, con consecuencias políticas y económicas importantes. Será toda una evaluación de las consecuencias de una gran concentración y espectáculo.
De momento, los únicos que parece que  pierden si o si son los habitantes de Sturgis. En el mejor de los casos, ya saben que los referéndums ya no sirven de gran cosa, la calidad democrática de su sistema político ha recibido una duro golpe. En el peor, tendrán un pueblo infestado de coronavirus. Al pueblo de Sturgis tiene las de perder, después de tantos años de disfrutar de los beneficios que aportaban tantos visitantes.
Autor: Francesc Nolla